Eventos

Amplía tu visión de negocio y actualiza tus mejores prácticas.

Grupos especiales

Creemos en el poder de la colaboración.
Únete a nuestra red de empresarios y profesionistas.

Formación

Conoce la lista completa de nuestra oferta formativa.

Por Enrique Espino Barros

Las empresas de vanguardia se embarcaron en jornadas de mejora continua y transformaciones radicales hace más de 15 años, motivadas por factores diversos como la competencia mundial, la necesidad de ser líderes en los mercados que participan o de atacar oportunidades internas y externas, y aprendieron que Lean es innovación.

Han enfrentado muchos retos desde el temor a lo desconocido, evolucionando de la producción en masa a uno-por-uno, combinando la operación diaria con las actividades de mejora y lidiando con la resistencia al cambio.

El mantenimiento de estos procesos de mejora e innovación incremental solo es posible con el compromiso de la Dirección General conectando objetivos de negocio con el avance Lean, haciendo benchmark permanente, apoyándose en especialistas y en otras iniciativas para apuntalar las mejoras y habilitar posibilidades superiores.

Invierten de manera permanente en la capacitación enfocada a la mejora continua y actualización del conocimiento para solucionar problemas puntuales y estructurales.

Aseguran que su gente sea parte de la estrategia de la mejora e integran sus ideas. La participación es la piedra angular de la transformación que aunada a la capacitación especializada habilita a toda la organización para enfrentar los nuevos retos. Es clave que la Dirección lleve dos riendas, la de los objetivos del negocio y la de su iniciativa cultural.

Las nuevas tecnologías digitales presentan una oportunidad para mejorar eficiencias y la velocidad de respuesta en tiempo real. Ayudan a tomar mejores decisiones, a construir sistemas de inteligencia de negocio, analítica de datos para decisiones futuras, entre otras cosas.

Lean & Digital tienen un objetivo común, la eficiencia de los procesos productivos y juntas potencializan los beneficios. Digital potencia Lean. La sensorización permite la observación exhaustiva de los procesos. Los métodos de solución de problemas mediante datos masivos e inteligencia artificial son una herramienta poderosa siempre y cuando se sigan las reglas del método científico en la solución de problemas. Digital debe aplicarse en procesos estables para una mejora substancial, mismo principio que en Lean. Lean es el motor que permite limpiar el proceso para luego digitalizarlo.

La motivación para digitalizar está en solucionar los problemas en tiempo real por los empleados. La digitalización ayuda a resolver problemas observando patrones que en forma humana es complicado. La utilización de maquinaria puede alcanzar niveles de otro orden de forma sostenible. La fuerza laboral se tendrá que especializar. El sistema “pull” y las corridas cortas serán características de diseño de los procesos. El operario podrá dedicar más tiempo a la mejora y también deberá ser facultado con capacidades digitales para trabajar de forma más efectiva y flexible.

Es necesario que toda organización se plantee el reto de la digitalización de manera inteligente y vinculada a la transformación Lean para definir los esfuerzos necesarios, desde automatización, monitoreo de activos, hasta estrategias para estandarizar herramientas y procesos de digitalización.

Las iniciativas Lean & Digital deben ser parte de la Estrategia Global de las Organizaciones e implementarse en cascada. La digitalización lleva el desempeño de las operaciones a otros niveles, el que se quede fuera no va a poder competir. El riesgo es mayor para los que no han avanzado en la transformación esbelta. Digital sin Lean va a dar resultados pobres y no sostenibles. Así como Lean es una estrategia para reducir desperdicios que esconden costos, Digital lleva a optimizarlos.

El principal reto para iniciar es que el liderazgo de la organización encuentre en la digitalización un caso de negocio muy claro y facilite los recursos. Es necesario entender las bases requeridas para que la digitalización se implemente, la relación entre el hardware y lo digital.  Otro reto son las competencias técnicas y falta de pericia en algunas de las tecnologías, así como la actualización de equipo obsoleto y selección inteligente de los proveedores tecnológicos.

La ignorancia en torno a las oportunidades y amenazas que conlleva la digitalización puede dejar a la organización atrás en competitividad. La estrategia digital debe formar parte del proceso innovativo para trazar el futuro de la organización. El que se quede fuera no va a poder competir. El riesgo es mayor para los que no han avanzado en la transformación esbelta. No podemos dejar que nos alcance el futuro, ya tenemos lecciones aprendidas cuando pasamos por la transformación Lean. Debemos ser sólidos operacionalmente realizando mejora continua de manera permanente y usando la tecnología al alcance.

 

“La Visión de una Compañía debe ser impulsada por las aspiraciones de sus Clientes”

Konosuke Matsushita